martes, 27 de mayo de 2008

Muñeca rota





He despertado esta noche
y he sentido miedo
sangraba por los ojos
lágrimas oxidadas
de un juguete quebrado.

Marioneta sin hilos
en el baúl del ayer
muñeco de ventrílocuo
en las manos de la soledad.

He despertado esta noche
y he sentido miedo
de ser asidua al insomnio
seguir sangrando sombras
y creerme
que no estás a mi lado.

10-05-2008

15 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Sobrecoge este poema.

Espero que sea una pesadilla y nada más.

Besos.

Malena dijo...

Siempre tenemos miedo de perder a lo que más queremos y eso lo reflejamos en los sueños.

Sandra, corazón, deja las pesadillas a un lado que la felicidad la tienes en tu mano.

Y faltan....

Un beso muy grande.

Trini Reina dijo...

A veces, ni queremos dormir, para no soñar según que sueños...

Besos

Jesús Arroyo dijo...

Hola Sandra:
Los malos sueños hay que contarlos para que nunca se cumplan. Los dulces son solo nuestros.
Un beso madraza.

Anónimo dijo...

sandrilla
eso es un miedo.

y los miedos son hijosdeputa que nos impiden respirar.

bso.,
cuídese.

Sibyla dijo...

Cuando somos felices
tememos...

Tememos que se rompa algo,
que nos demuestre,
la otra parte oscura de la vida.

Sandra, en tu caso
la esperanza te aguarda,
con el nombre de María.

Ya falta menos para a brazar a tu niña!

Besitos maternales:)

ralero dijo...

Conozco muy bien esa sensación. Espero que no la sientas demasiadas noches, es terrible. Aunque, querida Sandra, somos muchos, aun en la distancia, los que estamos a tu lado.

Besos.

Ps. Cada vez queda menos, eh. Espero que todo vaya bien.

Anónimo dijo...

Intenso.

Muy intenso, como las sensaciones calladas por no saber como decirlas.

Un saludo.

TrasTera dijo...

HOla Sandrita, cómo va tu feliz espera?? Ahora llego de la presentación del libro de Fernando, así que ya tengo sus hormigas entre las manos!

Respecto a tu entrada, nos dejas un poema tembloroso, lleno de temores, la noche con sus fantasmas. Pero siempre vuelve el sol.

Un besico!!

Sandra Garrido dijo...

Toro fue una pesadilla, de esas tan realaes,

Ayyy Malena, ya sabes que los sueños sueños son y no se pueden controlar, pero sí escucharlos para bsucar la raíz.

Trini, que razón tienes.

Chechu, entonces he hecho bien. Un besazo

Gsus, te echaba de menos, hijosdeputa a los que debemos llenarlos de su propio sudor.

Sandra Garrido dijo...

Sibyla, un mensaje positivo que me llega al alma y me da vida, gracias.

Rafa, parece que ya han pasado, pero hubieron noches que ni siquiera el sueño era alivio, otras en el que era una pesadilla, y despertares llenos de agua...ya me entiendes, pero sé que no estoy sola, un besazo

Oceanida, bienvenida, gracias por tu paso , espero verte amenudo.

Elisa, que envidia me das, con las hormigas recorriendo tus ojos y alimentando las sensaciones. Un abrazo compi.

dijo...

Pero estaba al despertar... y los sueños aveces son las pesadillas que nos muestran lo que jamás querríamos que sucediera...
besos

Néstor Morris dijo...

He despertado esta noche
y he sentido miedo
de ser asidua al insomnio
seguir sangrando sombras
y creerme
que no estás a mi lado.


Como te han dicho...sobrecogedores versos, querida amiga.

El placer, siempre, de hallarte.

Cariños.

LE CHEMIN DES GRANDS JARDINS dijo...

Très beau poème cauchemardesque ! Nul ne peut t’accompagner dans tes cauchemars sous peine d'en vider la substance et briser la catharsis. Ne te plains pas, ta poésie est puissante.

Roger

Francesc Cornadó dijo...

Un poema conm el mísmo título estaba en mi libro Doble tall, en catalán, ahí va la traducción:

Muñeca rota

Te han roto el alma a pedazos
negros de dolor y tu corazón aún
búsca en el abandono un latido cercano,
y esperas que unos brazos te abracen de nuevo.

Ante el espejo buscas el color
de aquellos labios rojos que te hicieron cautiva.
Hoy las fresas no te revelarán
ninguna aurora de fuego, han madurado.

Ahora representas una función,
en la soledad, con un asistente
único que contempla tu baile macabro.

¡Qué malvado y pérfido es el amor
que en la noche disfruta de las danzas tristes
que bailan las muñecas rotas por el llanto.

Salud
Francesc Cornadó