martes, 12 de marzo de 2013

TAL CUAL


Mis letras no pueden esperar
dentro de un cajón,
como no se fingir
y vestir de palabras al silencio
o sonrisas,
disfrazarme de alegría,
disimular
los no me pasa nada
con énfasis o acentos .
 

Ya quisiera
colocarme botas altas,
cada día,
de tacón fino
y equilibrista
pasearme airosa 
por las cornisas de la vida
pero hay días,
de calcetines con agujeros
que no tapan los zapatos.

6 comentarios:

Dylan Forrester dijo...

Certeros versos, me quedo con el logrado remate final:

"pero hay días,
de calcetines con agujeros
que no tapan los zapatos".

Nos leemos.

Besos ;-)

Sandra Garrido dijo...

Hola Jorge,

Entrega total en este poema, libre y hasta dañina, siento tan vulnerable a ese pequeño que late tan fuerte.

Gracias por tus palabras

Un saludo

Darío dijo...

Los días de calcetines con agujeros...y asi es como también, las letras desbordan por todas partes. Un abrazo.

Sandra Garrido dijo...

Gracias Darío por tomarte las molestias de dedicarme unos minutos. Un abrazo sin agujero

TORO SALVAJE dijo...

Hay días de horas mutiladas que sólo admiten poemas desgarrados.

Saludos.

Sandra Garrido dijo...

El vacío suele llenar demasiado, me alegro de verte por aquí.

Un abrazo