martes, 15 de abril de 2008

RUINES

Subastan en la esquina
las tripas del pescado,
un gentío hambriento
se alborota.
Entre gritos y miradas de búho
amontonan insultos en los adoquines,
aunque se queden sin su parte de intestino
habrán dejado aliviados
sus ruines y contenidas almas

12 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Y más, y más, y más, cada vez me gustan más tus poemas.

Créeme.

Besos.

Lucas A. dijo...

Ay sandra sandra... No sé en qué bando de los dos estás en el poema.
Pero estés donde estés, grita y desahoga.
Bss

ralero dijo...

Así es, querida Sandra, esta perra vida. Las jaurías ávidas por olfatear la sangre de los muñones para olvidarse por unos instantes de sus propias miserias.

Un fuerte abrazo, preciosa.

CARLA BADILLO CORONADO dijo...

Sandra:

siempre es un placer regresar a tu oscuridad, donde encuentro mucha luz, mucha poesía. He leído la entrevista que te la hacen en el CREATURA. Es bueno conocerte un poco más.
Abrazo.

Kebran dijo...

BIEN,¿TODO MEJOR? AQUI TIENES MI LUZ, SIEMPRE, YA LO SABES
EL KEBRAN

Anónimo dijo...

Anda, grita y grita que te oímos y leemos. Luego, recapacitar hemos de.

Besos y Abrazos.

PD: leí la entrevista en Creatura y me gustó. Sobre todo lo de leo más prosa que poesía. Esto me pasa a mi también.

carlota dijo...

Realmente es un aullido con todas las de la ley. Y con algo de "gore", entre tripas e intestinos, que consigue ese efecto rompedor e impactante.
Un abrazo fuerte

Sibyla dijo...

Hola Sandra!
Como siempre tus poemas no dejan
indiferentes, y dan mucho
que pensar...

Ah, elijo ser una ventana!

Besos querida amiga:)

Manuel Rubiales dijo...

Bueno, está claro, hay versos que no tienen otra forma de germinar si no es de entre las visceras.
Impactante texto.

Vino y besos.

Sandra Garrido dijo...

Gracias a todos por dejarme esta luz, este blog no tendría sentido sin vuestros comentarios.

Un abrazo

Trini Reina dijo...

Será por poco tiempo, ya se sabe que estos son insaciables.

Besos

poessia dijo...

Hola Sandra

Logrado el concentrado poema, que parece vaya a estallar.

Un abrazo