No cielo, no puedes ahogar el quejido, ni tú ni nadie, no es sano. No solo es imprescindible soltarlo cuando surge si el axioma numérico impone su dictadura de decimales ( solo se me ocurre traducir esto al lenguaje bancario ;) en lugar de silenciar(te), que efectivamente oprime el diafragma hasta asfixiar, colócate en ventanilla frente al interventor del banco, respira profundamente apriétale los mofletes con una mano mientras le miras fijamente y le dices exactamente estas palabras: No pienso pagarte ese TAE leonino y usurero ¡so rata! me voy a la competencia ;)
Es solo una broma de oxígeno ante la impresión que causa esta preciosidad d poema tan hondo y escueto como asfixiante. Mejor te dejo una tijeras de cariño para hacerle un agujero por el que puedas respirar ...abre la ventana y grita o un armario si no quieres asustar a los vecinos, donde sea pero suelta todo lo que te oprime ... si me necesitas silba .. ya sabes donde ando siempre encantadísima de leerte.
Mil besos mi cielo, a ver .. inspira, expira, inspira .. repite despacio y sin parar ... mi querida SANDRA!
Que no te oprima demasiado ese pronombre, hay que dejarlo salir, hacer que hable, y diga cualquier palabra, exacta o no, hay que decir incluso el pronombre, y todos sus números. Gracias, Sandra, un abrazo
El pájaro manso moraba en la jaula, y el pájaro libre en el bosque. Pero el destino había cruzado sus sendas. El pájaro libre cantaba:”Amor, volemos al bosque”. El pájaro enjaulado decía suavemente:”Ven tú aquí; vivamos los dos en la jaula”. Decía el pájaro libre: “Entre rejas no pueden tenderse las alas”.”¡Ay!”-decía el pájaro preso-¿sabré yo posarme en el cielo?” El pájaro libre cantaba: “Amor mío, entona tus canciones al campo”. El pájaro enjaulado decía: “Permanece a mi lado; te enseñaré la canción de los sabios”. El pájaro libre cantaba. ”No, no; nadie puede enseñar una canción. El pájaro enjaulado decía: “¡Ay!” No puedo escapar. ¡Mis alas están muertas!
7 comentarios:
se disolvió el rastro.
calló
la voz
no más axiomas
besos
A veces hay que dejar que fluja el quejido y no dejarle ahogar. Un beso.
Amplitud de ser en la opresión del todo; cuanto más pronombre, más necesidad de aire.
Quizás demasiados quejidos ahogados, demasiadas historias y emociones cercenadas en nuestras gargantas.
Precioso poema...
No cielo, no puedes ahogar el quejido, ni tú ni nadie, no es sano. No solo es imprescindible soltarlo cuando surge si el axioma numérico impone su dictadura de decimales ( solo se me ocurre traducir esto al lenguaje bancario ;) en lugar de silenciar(te), que efectivamente oprime el diafragma hasta asfixiar, colócate en ventanilla frente al interventor del banco, respira profundamente apriétale los mofletes con una mano mientras le miras fijamente y le dices exactamente estas palabras: No pienso pagarte ese TAE leonino y usurero ¡so rata! me voy a la competencia ;)
Es solo una broma de oxígeno ante la impresión que causa esta preciosidad d poema tan hondo y escueto como asfixiante. Mejor te dejo una tijeras de cariño para hacerle un agujero por el que puedas respirar ...abre la ventana y grita o un armario si no quieres asustar a los vecinos, donde sea pero suelta todo lo que te oprime ... si me necesitas silba .. ya sabes donde ando siempre encantadísima de leerte.
Mil besos mi cielo, a ver .. inspira, expira, inspira .. repite despacio y sin parar ... mi querida SANDRA!
Que no te oprima demasiado ese pronombre, hay que dejarlo salir, hacer que hable, y diga cualquier palabra, exacta o no, hay que decir incluso el pronombre, y todos sus números.
Gracias, Sandra, un abrazo
m.
El quejido es algo que sufre el amor
y liba el sicópata.
A su debido tiempo.
Un saludo
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